EL MOTIVO DE LAS MANOS

El 
fuego migra 
por tus pupilas sigilosas, 
pero en cada 
latido de las entrañas, 
resurge el aliento, 
aunque te nombre 
ante tanto silencio

Aun así. 

Te encuentras 
frente a la noche en 
carnes vivas, y ante los 
temores 
que se desabrigan para 
que los lleve 
el viento.

De allí, 
el motivo de las manos, 
que al aferrarse de la piel,
invoca a las intenciones 
del alma.

Como 
también invoca a los 
sentimientos, que 
hilvanados 
se derrumban con 
prontitud 
y sin miedo.

De tal modo

Aprietas 
los dientes, para sujetar 
la rebeldía 
que viene por dentro y 
para que lo inconcluso 
se desvanezca 
a tiempo y destiempo.


Artista: Dario Aguero 
(Buenos Aires, Argentina) 
D/R

En 
la bóveda del tiempo, 
retozan 
las pupilas y retoza el 
silencio, sobre los 
labios tiesos. 

Y 
entre 
los sinsabores, y los 
sentires, 
está el instante boca, 
desvelándose de
imágenes, al margen 
del destino.

O 
al margen del 
momento, 
porque es, cuando 
duele menos, los 
palpitares 
y el respiro.

De igual modo.

Alcanzas 
al eterno femenino, 
mientras que los 
colores de las mejillas, se tiñen 
de luces y deseos 
vivos.

No obstante.

Cuando 
la noche calla, 
despiertas, 
para seguir siendo tú, al 
otro lado del espejo.


Autodidacta: 
Irene Ciunel 
(Carhué, Argentina) 
D/R

A MITAD DEL ALMA SOBRE EL PECHO

Por qué
se agrandan las pupilas 
tan de golpe, 
si la noche se agita 
sobre las costuras de 
las pestañas, y a mitad 
del alma sobre el 
pecho.

Pues 
tu mirada 
intensamente 
aceitunada, describe al 
sobrecogedor 
silencio, mientras 
murmura una luz 
anochecida.

De ese modo, 
las penumbras de los 
labios imitan a las 
frutas 
cuales maduras 
aroman a tiempo 
y pasión.

O 
aroman 
a desnudez y calma, 
sin importar cuantas
líneas de la luna se 
refleja en la piel.

Sin lugar a dudas

Son 
las mejillas sonrojadas 
las que codician un 
amor verdadero, 
mientras el crepúsculo 
orbita por los sones de 
tus pelos.


Artista: 
Martiniano Irusta 
(Bahía Blanca, Argentina) 
D/R

EN LAS ESFERAS DEL ALMA

Tu 
iris celestino, 
esclarece hasta las 
esferas de mi alma.

Y 
aunque 
tenga escrito tu nombre 
en las entrañas, me 
echo 
a respirar, ante el 
trapecio amarillento 
de tu anochecer.

Sin embargo.

No 
todo es silencio
y no todo los hombres 
comprenden el epílogo 
de la lindeza.

Por 
consiguiente, 
logro que las ilusiones, 
no se detengan ante la 
decadencia 
que se aproxima, sino 
al contrario, 
que se tiñan de luces 
y suspiros.

Después...

Tu sur, 
entre los ocres del 
otoño y mi norte 
escalado, sobre 
tu brillo embelesado de 
anhelos 
y cielos.

Más 
el susurro de los labios
y el aroma, cual 
circundante de los 
pelos, amamanta mi 
vuelo.


Autodidacta: 
Irene Ciunel 
(Carhué, Argentina) 
D/R

A CIERTAS HORAS DE LA LUNA

El 
amor, es como la relente 
calmada, 
y es como el silencio 
más profundo, pero 
aromatizado 
por la primavera.

En 
esa ecuación 
de esencias y tiempo, 
solfeas 
sobre los intervalos del 
suspiro, hasta que los 
acordes 
se comploten con dicha 
pasión.

Aun así, 
tus trazos colgados en 
el espacio 
apuran al ocaso, para 
que los sueños se 
pronuncien 
a viva voz.

Aunque después, 
los pistilos del alma 
anticipen las emociones 
a 
ciertas horas de la luna

O 
a ciertas horas de la 
noche, 
porque es allí cuando 
las expresiones 
coloridas 
eternizan el instante.

Artista: 
Cristina Gallino 
(Buenos Aires, Argentina) 
D/R

AURORAS Y VINOS

En 
tus ojos 
habita el incógnito 
dulzor del pecado.

Incluso 
las pupilas se 
embriagan de instantes, 
aunque 
después se empañan 
de radiantes 
auroras y vinos.

No obstante.

Aguardas 
entre los ocasos 
rabiosos, 
a que el temblor de los 
portales pestañee entre 
los labios 
semiabiertos.

Y 
aunque 
todo presta a divertirse, 
eres tú la que decide 
peregrinar como 
pasajera anónima 
en las bodegas del 
tiempo.

Sería 
como el juego de tu 
ego, 
bajo la complicidad de 
los acordes de las 
mismísimas entrañas.

O bien un sueño, 
que por sobre el 
universo da la piel, 
libera la pasión 
al suspirar.


Artista: 
Martiniano Irusta 
(Bahía Blanca, Argentina) 
D/R