
Hoy en PLANETA LITERARIO, Santos Miguel Gonzalez nuestro Director General de la Dirección Mundial de Poemas, Poesías, Prosas y más… nos presenta a quien nos acompaña el día de hoy desde Mérida Yucatán México: la escritora Guadalupe Mota Chávez más conocida como Gema Sánchez quien desde niña sintió afecto por la poesía. Talento y virtud con la que creció, hermoso regalo que Dios le concedió.
Poeta y declamadora e inspirada en la poesía por Sor Juana Inés de la Cruz y con influencia en sus letras por poetas como: Peza Neruda y Benedetti. Tiene además dominio en microrrelatos, cuentos, novela corta, fábulas, sonetos, glosas, sextina octava y sexta, Becquerianos, haiku, madrigal silva clásica, romance, lira y decima real y espinela.
Gema Sánchez es optómetra de profesión y madre de dos hijos y que hoy nos enorgullecemos en presentar junto con alguna de sus obras todas con derechos reservados.
QUIERO ENCONTRARTE… (Prosa)

Me la vivo jugando a la ruleta rusa por encontrarte cuando la soledad patina en los residuos de invierno que duermen la siesta bajo mi almohada y el corazón ansía bailar un vals con el sol de abril…
Cuando la señora esperanza exhala el último aliento de vida, ansío tenerte enfrente como tabla salvadora para el náufrago… quiero encontrarte… quiero toparme contigo en alguna calle silenciosa después de una lluvia veraniega, para mirarnos en los charcos y reír a carcajadas mientras chapoteamos en ellos…
Cuando el destino carga la mochila que ha llenado de incertidumbre y emprende el camino hacia ninguna parte, quisiera mirarte de frente para encontrar en el café de tus ojos las respuestas a las preguntas que se amotinan en el alma… quiero encontrarte… y… no sé porque tengo la imperiosa necesidad de hacerlo, no te he perdido, ni siquiera te tuve jamás pero siento que me perteneces…
Cuando las lágrimas hacen fila y bailan limbo con mis párpados quisiera tus manos en mis rostro para arrojarlas al precipicio de tu consuelo y encontrar en la curva de tu hombro derecho el engranaje perfecto para mi mutismo… quiero encontrarte para decirte a la cara lo mucho que te he buscado y aprovechar tu confusión para establecer un trato entre tu boca y la mía; para hacerte entender que tus brazos tienen la medida exacta de mi cintura y tu voz los decibeles precisos para pronunciar mi nombre… quiero encontrarte… para después perderme de ti y entonces seas tú… quien necesite encontrarme, por el simple hecho de ya no saber qué hacer con tu vida… sin mí…
UN ADIÓS SIN EXTENSIONES (Soneto Inglés o Shakesperiano en Alejandrinos)

Por favor ya no pongas al adiós, modo “pausa”, da luz verde que, al caso, al final llegará; no requiere extensiones que es efecto a la causa, lo que tenga que ser, sin remedio será.
No requiero demandas excedidas de ofertas ni consuelos sacados de un motel de pretextos, prostituye tu lengua con mentiras abiertas que verdades a medias se hacen falsos contextos.
Ve iniciando el camino y no dejes migajas que te marquen la senda, porque nadie precisa que retornes los pasos pues aquí ya no encajas; ya lo iras superando y si no… ¡improvisa!
Un adiós anunciado hace espeso el entorno. Aspirar aire fresco, no tolera soborno.
SOPITA DE LETRAS (Microrelato)

No cabe duda, que las abuelitas son sabias y tienen remedios para todo mal, desde un simple resfrío hasta heridas del corazón…
No existía malestar que la abuela no sanara con sus menjunjes y desde luego, todos los miembros de la familia, recurríamos a ella en busca de una cura para la enfermedad en turno.
-Para la gripe un caldito de pollo y ungüento en el pecho, nada más efectivo ¡Ah! y un beso en la frente- decía mi abuelita.
Una noche, triste y abatida por la ruptura de una relación, miraba hacia la nada, en absoluto silencio a través del ventanal, serían alrededor de las 2 am. todos dormían en casa, o al menos eso pensaba… así que aproveché para dar rienda suelta a mi dolor, cuya expresión se había traducido en amargo llanto, cuando de pronto di un salto que casi me ponía en contacto con el techo, al sentir la mano de la abuela… -¡Abuela! por Dios, mujer, me matarás de un infarto… -dije, al tiempo que me llevaba una mano al pecho. La abuela rio de buena gana y tomó asiento a mi lado -Abue, deberías estar durmiendo, estarás cansada -dije con tono de preocupación Ella rio nuevamente y con esa voz característica, mezcla de amor, dulzura y firmeza, dijo: -Hijita, nada es lo suficientemente grave como para no superarlo, esto también pasará… nada que una sopita no solucione amor -mencionó tomando mis manos en las suyas. Yo la miré extrañada y le dije – abue, no dudo del poder curativo de tus sopas, pero esta vez… perdóname, pero esta vez, dudo que una sopita alivie mi dolor -concluí con un dejo de amargura.
Mi abuela se puso de pie, sonrío y desapareció del salón, quedé mirando de nuevo hacia la ventana y de pronto, la abuela había regresado, me extendió unas hojas en blanco y un hermoso bolígrafo metálico en tono rosa con plata, en un estuche del mismo color, la miré fijamente sin entender, y al notar mi turbación me dijo: – ¡Sopita de letras, mi amor, sopita de letras…! Escríbelo todo, lo que duele, lo que atormenta, lo que te roba la paz y bébetelo a sorbos en cuanto la tinta sazone en letras lo que cocinas por dentro… – Me quedé paralizada mientras sus palabras retumbaban en mi mente, «sopita de letras»… -«Sopita de letras…» -repetí en voz alta con la mirada en el papel y el bolígrafo- Hay abue…- sonreí y… comencé a escribir…
COMPULSIVA LOCURA DE AMARTE (Romance en Alejandrinos)

Descubrí que poseo un delirio constante, arraigada demencia que me lleva a lo ilógico cual veneno que invade y me llega a los huesos y me arrastra a la cúspide de un andar peligroso.
Entendí y acepté que esto es algo sencillo un genuino ejercicio de lanzarse hasta el fondo, compulsiva locura y deseo de amarte que rebasa los límites de un amor con decoro, el tic tac en el alma que acelera sus pasos regodea en espasmos que me llevan al cosmos, la vorágine férrea que me lleva hacia ti no descansa en su meta destrozándolo todo; compulsiva por mucho es la forma de amarte, no me importa saber, ¡dónde, cuándo ni como! solo sé que te amo, por capricho o placer, y me quedo con eso, que el amor es mi todo.
Compulsiva y absurda… y también algo loca mi ansiedad por amarte y el hacerlo de a sorbos disfrutando el sentirte tan ajeno y tan mío tan cercano y tan lejos que da igual uno u otro.
TENEMOS QUE APRENDER (Décimas reales)
Es triste darte cuenta que a tus años aun no has aprendido muchas cosas, que sigues atrapando mariposas y no has hecho recuento de los daños. Descubres que escalaste los peldaños y nunca te enfocaste en lo importante; ejemplo: ver de cerca al semejante y hacerte más empático con él, ponerte solo un poco en su papel; que hacerlo, te aseguro, ya es bastante.
Entiendes que la vida las has vivido y nunca la miraste cara a cara; y entiendes que al medir, la misma vara, será tu referente al ser medido.
Entiendes que en verdad no has entendido el punto más loable de existir, que el hecho no es el hecho de vivir, sino vivir sirviendo a los demás; la gloria solo, nunca alcanzarás, se trata de ir en grupo o ya no ir. Al punto de quebrarse el mundo entero descubres que eres polvo y nada cuenta, que toda posesión te representa tan solo el camuflaje del dinero.
Con este carnaval tan solo quiero, que al fin concienticemos nuestras fallas, saliendo cada quien de sus murallas y así poder vestirnos de humildad, hacernos de lo humano, humanidad y dando sin buscar ganar medallas.

ÁNGEL O DEMONIO (Soneto clásico endecasílabo)
Seré ese ángel tierno e inocente, de lúcidos donceles y virtudes, llevando entre ala y ala excelsitudes que te hagan ver el cielo diferente.
Seré febril demonio que violente tu cúpula de paz, en magnitudes de tal naturaleza que desnudes reservas de pasión concupiscente.
Te invito a despertar este volcán que duerme en el umbral de mi mañana, flanqueado por las cumbres de mis piernas
Te invito, de mi huerto, a ser Adán; ansioso de probar de la manzana que lleve a saborear vidas eternas.
