Moraleja: Nunca se debe uno burlar de los demás, ni presumir o ser vanidoso.

Todo parecía viento en popa con las principales compañías occidentales, cuando anunciaban que no darían la vacuna al costo a los demás países, ellos se daban golpes de pecho, rasgaban sus camisas y daban manotazos en el mostrador mientras le gritaban a todos que todos debían pagar su precio a pesar que recibieron millones de dólares de los gobiernos para su investigacion…

Ahora todo cambió, desde que Rusia dejó de ser el oso soviético y se guilló de canguro y dió saltos gigantescos para anunciar que volaba bajito con su vacuna aludiendo el radar y saltar varias etapas y ponerse en la carrera para septiembre, formándose la guerra de las vacunas en la Vía Láctea, Entonces los asociados e inversionistas de moderna, escupieron sangre y defecaron lombrices con los resultados de la vacuna en su etapa final, sus acciones pierden un tercio  de su valor  al tambalearse  por las dudas de su propia vacuna…

Según datos sobre las investigación realizadas a la Compañia Moderna que compite con Astrazeneca asociada con la Universidad de Oxford, que es mucho más experimentado que ellos, develan que sus directivos vendieron 90 millones de sus acciones como perros calientes en una esquina de un boulevard. Por otra parte, a pesar que Vladimir Putin se lanzó desde la cima de un árbol y se tiró como Tarzán, sorprendiendo al mundo que tenía la vacuna, Sputnik-V y luego anunció otra sumándose dos en total y el Tío Sam Puso el grito en la luna, ahora Putin encontró opositores en trabajadores de primera línea que no confían en su vacuna.

Estos mismos trabajadores, tales como médicos, maestros y de primera línea, ahora le tiemblan las rodilla debido a que la hija de Putin tuvo temperaturas altas después de aplicarse las dos dosís requerida. La vacuna rusa recibió su nombre Sputnik-V del sorpresivo lanzamiento en 1957 del primer satélite del mundo por parte de la Unión Soviética, Esta vacuna es desarrollada por el Instituto Gamaleya con sede en Moscú.