Por Antonio Pippo

Hay personas que pasan por la vida como un vendaval de actividades donde priman las alegrías. Una suerte de humor en múltiples matices destinada a la felicidad de los otros, pero usando ese arte, aunque no todos lo capten, para pensar con más benevolencia y para luchar contra sus propios demonios, escondido en metáforas sutiles.

 Personas necesarias, la verdad sea dicha.

Jorge Sclavo Arman -popularmente el “Cuque” Sclavo- fue una de ellas y gozó en vida de una gran popularidad, que luego, después de la despedida final, se ha ido disolviendo cuando, quizás, más necesario es su recuerdo y reconocimiento en medio de la vida social en degradación que soportamos.

Fue escritor, periodista, ilustrador, actor, director de teatro, crítico de cine, novelista y cuentista.

En una suerte de humilde rescate para mis escasos pero queridos lectores, se me ha ocurrido imaginar un reportaje sobre la realidad actual, con respuestas de Cuque son forman parte textual de uno de sus más celebrados libros: “Enciclopedia Cuquess”.

-Querido Cuque, estoy preocupado por la situación social y política, en especial la educación, que se acerca a un abismo.

-Bueno, usted no se acerque demasiado porque se convertirá en un abismático, ese que cada vez que cae a un abismo le falta el aire.

– Le confieso que me deja absorto con esa respuesta.

-Absorto. Cuídese. Se le dice así aquellos que quedan embelesados mirando los cola-less en la playa.

– Pensaba que iba a tomar la batuta de esta charla para dejarnos algunas ideas constructivas…

-¿Ve? Sigue mal. Jamás le diría esa palabra a Batman, después del golpe.

-Me parece que está jugando al billar conmigo y yo no emboco una…

-Mire, el billar nace, como muchas otras cosas, en el Renacimiento. Debe su nombre a Jean Bautiste Billar, inventor famoso por sus bolas, tanto que se organizaban excursiones para verlas, lo que a la sazón se transformaría en un juego. Yo no tomaría a la ligera a los boludos.

-Pero los políticos de hoy parecen cangrejos…

-Ahí acertó…el cangrejo es un perro que camina para los costados para engañar a los otros que creen que camina para atrás. Usted habló de políticos… Prefiero hablar de creadores.

-¿Y entonces…?

-Hay que pensar en curiosidades. Una abnegada enfermera inglesa, Florence Nightingale, de gran corazón y mente lúcida, tuvo la brillante idea de pintar una cruz roja sobre las ambulancias y los hospitales con el fin de que la artillería no les erre. Necesitamos audacias ¿no cree?

-Yo veo muchos demagogos…

-¡Y claro! Se alimentan de los pobres y los hacen evacuar con facilidad.

-¿Coincide con el diagnóstico?

-¡No! ¿Diagnóstico? Es un virus. Anda mucho.

-¿Cree que esta elección sirvió para algo?

– La elección es un sueño frecuente entre los chinos de edad provecta. No sé si me capta…

-¡Pero ya no se puede creer ni en el fútbol!

-No. Porque el fútbol fue inventado por Karl van Prietus (luego conocido como Carlitos Prieto, cuando en la ciudad de Bayer fuera juzgado por el tribunal antidoping por introducir la Aspirina). Después de eso, siempre vino brava la mano pese a las farmacias…

-Me está deprimiendo…

– Necesitamos gallos…

-¿Por qué?

-Porque su espíritu de sacrificio. Son aves gallináceas a las que tener un hijo le cuesta un huevo. Muy buenos contribuyentes.

-¿Y que ocurrirá con estos amagues de tercera guerra mundial?

-Es un problema de hemisferios. Se toma una pelota, se la engoma bien engomada y se le forra con un planisferio. Luego, los contendientes más potentes la cortan bien al medio pero uno se queda con los dos hemisferios. No sé para qué. Pero, en fin…

-Gracias, Cuque. Muy instructivo. Me ha dejado sin palabras…

-¡Eso nunca! No sabe cuánto se aprende sobre todo en los diccionarios. La palabra, por ejemplo, sigue siendo vital. Sólo que antes la empeñaban y ahora la regalan…

-Siento que me voy sin cabeza, acéfalo…

-¡Pah, se lo cortaron…!