«Paz… palabra expresiva, sueño anhelado, de muchos predicada, pero de pocos practicada«

Rossi Er

Además de ser un anhelo permanente y presente en todos los seres, es un derecho constitucional del individuo y la sociedad. A partir de este principio cada nación legisla y procede de acuerdo a su constitución para promoverla en todos los ámbitos.

Más allá de ella como palabra y como sueño, todos sabemos cuánto cuesta lograrla y sostenerla pues son muchos factores los que la fragmentan y destruyen, desde nuestros actos cotidianos, hasta omisiones imperdonables en la aplicación de la justicia; Lo que sí es perentorio recordar es que la paz vista desde un sentido polivalente, comienza en los hogares, se fundamenta en el amor, respeto, solidaridad, educación, igualdad, equidad y justicia.

Todos estos valores, germinados en el individuo y aplicados a una sociedad, forman un ensamblaje cuyo resultado debería ser una actitud positiva, más humana, solidaria y en concordancia con ese anhelo universal y ese estado vivencial que todos necesitamos.

Derechos reservados de autor

Colombia