NADA, NADA, NADA, NADITA de NADA.
Hola, aquí estamos de nuevo disfrutando de una rica taza de café, viendo como las ideas se arremolinan en mi cabeza pensando en tantas cosas que suceden a nuestro alrededor y que solo podemos ver cuando nos mantenemos atentos a lo que sucede fuera de nuestra cúpula de seguridad, porque claro, todos tenemos una aunque no sea intencional, ahí está y solo cuando nos atrevemos a mirar más allá de ella vemos otro mundo que segundos antes estaba invisible. Continúa leyendo NADA, NADA, NADA, NADITA de NADA.
