Nunca pudo imaginar Federico García Lorca cuando publicó su obra de teatro más surrealista, Así que pasen cinco años el 19 de agosto de 1931, que la fecha, el título y su contenido, que él mismo calificó de “teatro imposible” iban a resultar absolutamente premonitorios. Porque exactamente, al cumplirse los cinco años de la publicación, Federico fue asesinado, terminando así como su personaje protagonista, el joven, quizá pensado como alter ego suyo. Continúa leyendo Lorca, premoniciones y Camarón de la Isla